sábado, 3 de julio de 2010

Un dia, 35 horas


Así nos cundió el primer día de viaje. Llamémosle cundir por decirlo de alguna manera.
Nos sentaron separados en el avión, pero gracias a una chica tatuada hasta las cejas y a mi cara de pena, penita pena nos cambiaron el asiento. Al llegar a Newark nos enviaron a una sala con policías para revisar la documentación de mi consorte (jejejeje, si es que es un delincuente). Son tan amables (leáse con ironía, por supuesto) que nos metieron dentro de un ascensor y sin explicación alguna nos tuvieron en una sala esperando hasta volvernos locos (más que nada que nuestras maletas andaban por el aeropuerto y en 1hora teníamos que coger otro avión).
Al fin cogimos el vuelo a Las Vegas y llegamos agotados (casi 20 horas –con sus embarques y aviones respectivos). Fuimos a recoger las maletas y después de esperar un rato (largo) nos dimos por vencidos: ¡las maletas habían desaparecido!. Amablemente el chico de la compañía aerea nos dijo que tenía un mensaje para nosotros (yo ya creí que las habían requisado en NYC como a los delincuentes en los que nos habíamos convertido)….Pero nooooo… solo se habían “olvidado” de cargarlas en el avión.
Al salir del aeropuerto nos pegó un bofertón de calor (por cierto, es asfixiante) que casi nos caemos del susto (20 horas en aeropuertos y aviones donde la temperatura máxima es de 15 grados afectan a cualquiera). Nos fuimos hacía el hotel en taxi y nos instalamos en la habitación. Para ir adaptándonos al horario nos dimos una vuelta por LAS VEGAS BOULEVARD y me dormí (mi marió se durmió más tarde esperando las maletas dichosas).

1 comentario:

Unknown dijo...

Jo ja vaig dir....que era raroo k al Juanito no li donguessin el visat a la primera....amiga ten cuidaoo q me parece q estas con un delinquente y no nos lo ha contaoooo....jajajajajaa!!!us estimuu!!